Milicia de la Inmaculada
La Milicia de la Inmaculada (M.I.) es una Asociación Internacional de Fieles Católicos fundada por San Maximiliano Kolbe en el año de 1917, que en virtud de todos los cristianos a la santidad y al apostolado y por la misión constante de la Santísima Virgen María, en la economía de la gracia, se consagran a Ella totalmente con sus instrumentos para la conversión y la santificación de todos los hombres, usando, para este fin todos los medios legítimos según sus propias posibilidades.
La Milicia, no es sólo una sociedad de piedad, sino sobre todo, de apostolado valiente y enérgico, como el que ejerció febrilmente San Maximiliano María Kolbe, siempre en unión con La Inmaculada, para extender hasta los últimos rincones de la tierra y de la sociedad, el reinado de Cristo Nuestro Señor.
Finalidad
Nuestro fin es procurar que todos los hombres se conviertan a Dios, ya sean pecadores o no católicos, o no creyentes, en especial los masones; y que todos sean santos, bajo la protección y mediación de la Bienaventurada y siempre Virgen María.
Nuestro deseo en la MI es que el Reino de Jesús se extienda sin fin por medio de la Inmaculada, o mejor aún, estar al servicio de la Inmaculada en la misión que como Madre de la Iglesia ella tiene.
El fin de la MI es universal, como lo es la misión de la Madre de la Iglesia, es decir: Convertir a todos por medio de la verdad, de la Ley de Dios y de la unión con la Iglesia, “para que, mediante la intercesión de la Virgen María Reina de los Apóstoles, la humanidad sea cuanto antes conducida al conocimiento de la verdad, a fin de que con la ayuda de la Santísima Madre de Dios, sea una sola cosa”
Nuestro fin es procurar que todos los hombres se conviertan a Dios, ya sean pecadores o no católicos, o no creyentes, en especial los masones; y que todos sean santos, bajo la protección y mediación de la Bienaventurada y siempre Virgen María.
Nuestro deseo en la MI es que el Reino de Jesús se extienda sin fin por medio de la Inmaculada, o mejor aún, estar al servicio de la Inmaculada en la misión que como Madre de la Iglesia ella tiene.
El fin de la MI es universal, como lo es la misión de la Madre de la Iglesia, es decir: Convertir a todos por medio de la verdad, de la Ley de Dios y de la unión con la Iglesia, “para que, mediante la intercesión de la Virgen María Reina de los Apóstoles, la humanidad sea cuanto antes conducida al conocimiento de la verdad, a fin de que con la ayuda de la Santísima Madre de Dios, sea una sola cosa”
Les mostraremos más de la Milicia de la Inmaculada y no olviden nunca que SOLO EL AMOR CREA
M.I. Guabirá
Montero - Bolivia